Queso de oveja puro curado – Pieza de 1 Kg. Aprox.

27.17

Ingredientes
Leche cruda de oveja, fermentos lácteos, cuajo y sal Contiene leche .

Se recomienda que las personas intolerantes a alguno de los ingredientes añadidos al proceso de elaboración, no consuman aquellos productos que los contengan en su composición. Así mismo, la presencia de sal, hace recomendable un consumo moderado o bien que no sean consumidos por aquellos grupos de población, que por sus particulares condiciones fisiológicas o bien por problemas metabólicos (hipertensión, etc), pueda preverse, que los alimentos producidos son potencialmente peligrosos para su salud.

SKU: 000020 Categorías: , ,

Descripción

Descripción del producto

Elaborado exclusivamente para “Entrepeñas” por una empresa artesanal situada a las afueras de la ciudad de León, ofrecemos este exquisito queso de oveja puro de excelente calidad y en su punto óptimo de maduración.

Condiciones de conservación

Conservar en lugar fresco y seco.

La nevera, la mejor opción.

Sin lugar a dudas, aunque no sea necesario sanitariamente hablando por su baja actividad del agua, la mejor opción para conservar este tipo de queso es guardarlo en la nevera, a poder ser en los cajones inferiores. Esto te permitirá disfrutar de esta joya de la gastronomía durante más tiempo.

Las condiciones ideales para conservar este tipo de queso están entre los 4 y los 8 °C de temperatura y un 80-90 % de humedad.

¡Importante! Antes de consumirlo conviene dejarlo alrededor de una hora a temperatura ambiente, para que se atempere y puedas disfrutar al máximo de su sabor, aroma y textura.

La forma de cortarlo, influye.

Utiliza un cuchillo adecuado, que llegue fácilmente al centro del queso para cortarlo en diagonal en forma de cuña. La presencia de irregularidades favorece la aparición de microorganismos, por lo que hacer un corte seco y homogéneo ayudará a conservar el queso durante más tiempo. Calentar la hoja del cuchillo con agua caliente (y secarla) puede ayudar a obtener un buen corte.

Una vez abierto

Por supuesto, no es lo mismo conservar una pieza sin abrir que una abierta y ya cortada. Esto es básico para entender cómo conservar el queso manchego. Antes de volver a guardar en la nevera un queso que ya está empezado, conviene cubrir los trozos con papel de aluminio, film transparente o bien un trapo húmedo. Así evitaremos que entre oxígeno generando bacterias.

Otra opción muy buena para aquellos que podáis es la de envasarlo al vacío. Si tienes la oportunidad, corta unas cuñas de queso y envásalo al vacío para ir disfrutando a tu ritmo.

 

También puedes congelarlo para un consumo posterior, pero no te lo recomiendo, ya que tienes muchas posibilidades de perder textura, aroma y sabor, por lo que no merece la pena.